Mesoamérica es la región que comprende los países de México y Centroamérica. Su historia reúne las fascinantes civilizaciones que han ido apareciendo desde la Prehistoria hasta nuestros días. La recopilación se compone geográficamente de la siguiente manera: México, Centroamérica (Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá) y el Caribe (Cuba, Haití y República Dominicana). Esta obra ilustra los muchos conocimientos que necesitaban registrarse para ser conocidos, por lo que fueron solicitados a las plumas más talentosas, que conocían los secretos de cada pueblo y su artesanía. Representan a cada país y su folclore.
A lo largo de la historia, son regiones diversas en un interminable recorrido de curvas y colores, de picos y mesetas, de glaciares y desiertos que apelan a los sentidos de quienes las visitan; huelen a sus frutas, verduras y flores. Centroamérica es así y, según la época, se percibe el aroma de las tradiciones ancestrales y las nuevas formas de forjar los oficios del siglo XXI.
Comienza en México y nos lleva hasta la Patagonia. Es la ruta de los sentidos que cautivan. Al descubrirla, te darás cuenta de que, junto a la magia del móvil, que convive con los artesanos en todas las regiones, encontrarás al brujo y al chamán en sus ceremonias rituales en casi todos los pueblos. Encontrarás los elementos de la naturaleza, los cielos, los ríos y las lluvias, el fuego, el sol, la luna y, en esta cosmovisión, los espíritus más antiguos que hoy son cómplices en la estructura del sincretismo de América Latina. Estos objetos tejen hilos de oro y nos muestran las vetas de la madera, entretejiendo sueños; al mismo tiempo, trenzan la palma y se tiñen de añil junto con el barro que sale de la tierra y se convierte en un cántaro que canta, así como las filigranas que se tallan en diversos materiales como la plata y las hamacas que se duermen en el suave viento de estas tierras bendecidas por los dioses.
Su belleza no es el resultado de una técnica, sino que la técnica sigue lo impreciso pero perceptible en una pieza de cobre, lapislázuli, ónix, basalto u ópalo multicolor, obsidiana negra y ámbar de los dioses, en una gran cueva que se convierte en un crisol, como el molcajete, una pieza utilitaria y armoniosa, al igual que el comal, del que literalmente se nutren todas nuestras culturas.
Aquí encontrarás un legado cultural que enriquecerá tus conocimientos e investigaciones. Esta es la puerta que abre un vasto panorama que prodiga al visitante digital; objetos en su contexto que sintetizan valores, en un escenario que siempre teje a mano un cúmulo de tesoros para la humanidad, con el hilo de su sabiduría y ellos se convierten en los guardianes del tiempo.
Rosa Maria Rojas Navarrete
México.