Description
La cerámica se diferencia de la alfarería por las altas temperaturas con las que se elabora. Las piezas se someten a dos cocciones, la primera a 850 °C para cocer el barro, y la segunda a 1200 °C para que los pigmentos se adhieran y se endurezca el vidriado. En 2019, el proceso fue considerado por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Destacan la cerámica elaborada en Puebla, Tlaxcala y Guanajuato. A las dos primeras se les conoce como Talavera, pues se comienza su elaboración durante el México virreinal, con técnicas traídas de Talavera de la Reina, en España. A la producida en Guanajuato se le conoce como Mayólica, en referencia a la que se elaboraba en Mallorca. En ambos casos, la iconografía integra, además de elementos nacionales, otros de las culturas españolas, orientales y árabes, aunque cada taller imprime su estilo en el moldeado, la ornamentación, los colores y el esmalte.
Para producir, -ya sean vajillas, tibores, floreros, frascos, macetas o azulejos para recubrir pisos y paredes-, es necesario preparar el barro, amasarlo para quitarle la arenilla y el agua excedente, y secarlo en cuartos oscuros y sin ventilación, durante semanas. Posteriormente se moldea a mano, o en tornos de patada, y se procede a la primera horneada. Finalmente se coloca el vidriado y se decora con azul cobalto, amarillo, naranja o verde, usando finos pinceles de pelo o pluma, para volver a hornear la pieza a altas temperaturas.
Actualmente existen talleres que producen, exportan y enseñan estas técnicas. En Guanajuato es reconocida el maestro Gorky González, fallecido después de una larga vida trabajando piezas de mayólica. Él obtuvo diversos premios, entre ellos el Premio Nacional de Artes Populares 1992. Piezas cerámicas de gran calidad se pueden admirar en el Museo Nacional de la Cerámica, en Tlaquepaque, Jalisco.
english
Ceramics in Mexico
In Mexico, a difference is made between ceramics and pottery according to the temperatures at which they are made. The pieces are subjected to two firings, the first at 850 °C to fire the clay, and the second at 1200 °C , so that the pigments adhere and harden the glaze. In 2019, the process was considered by UNESCO as an Intangible Cultural Heritage of Humanity.
The pottery made in Puebla, Tlaxcala and Guanajuato stands out. The first two are known as “Talavera”, as their production began during Viceregal Mexico, with techniques brought from Talavera de la Reina, in Spain. The one produced in Guanajuato is known as Majolica, in reference to the one made in Mallorca. In both cases, the iconography integrates, in addition to national elements, others from Spanish, Oriental and Arab cultures, although each workshop imprints its own style on the molding, ornamentation, colors and enamel.
To produce, whether they are crockery, jars, tibores, pots or tiles to cover floors and walls, it is necessary to prepare the clay, knead it to remove the sand and excess water, and dry it in dark, unventilated rooms for weeks. It is then molded by hand, or on kicking lathes, and the first baking is carried out. Finally, the glaze is placed and decorated with cobalt blue, yellow, orange or green, using fine hair brushes or pen, to bake the piece again at high temperatures.
Currently, there are workshops that produce, export and teach these techniques. In Guanajuato, the maestro Gorky González, who died after a long life working on majolica pieces, is recognized. He won several awards, including the 1992 National Prize for Popular Arts. High-quality ceramic pieces can be admired at the National Museum of Ceramics, in Tlaquepaque, Jalisco.
Reviews
There are no reviews yet.